Desde el comienzo de los tiempos los leopardos han estado vinculados a los seres humanos. Resulta realmente fascinante estudiar las diversas culturas y la conexión que tienen con los leopardos. Muchos consideran al leopardo como un símbolo tanto de sabiduría como de fuerza. En África, el leopardo es un símbolo muy común para las empresas, equipos deportivos, e incluso escudos de armas.
Los antiguos egipcios, así como los griegos, tenían muchas historias en los que incluían a este animal, y existen registros de algunos individuos de alto perfil en la historia que mantuvieron al leopardo como mascota. El rey Juan III de Londres y Henry son los más notorios. Existen personas en nuestra sociedad actual a las que les encantaría aventura de mantener a un leopardo como mascota, no son capaces de recordar, sin embargo, que son criaturas extremadamente peligrosas y agresivas.
Muchas personas adoptan a un leopardo joven, comprado en el mercado negro y tratan de criarlo como lo harían con un gato doméstico. Les permiten dar vueltas por su casa y juegan con él, a medida que el animal se hace más grande, tiene que ser puesto en un recinto. Los espacios reducidos hacen que el animal se haga cada vez más agresivo.
También puede ser demasiado costoso albergar a un leopardo como mascota, consumen grandes cantidades de carne por día y en muchas zonas del mundo es ilegal mantenerlos como mascotas. Sin embargo, la gente sigue manteniéndolos y ocultándolos, lo que puede ser un gran riesgo. Existen historias frecuentes acerca de propietarios heridos o muertos a merced de su mascota leopardo. Varios zoológicos cuentan con una vivienda adecuada para el leopardo, los cuales son una atracción común para los que visitan dichas instalaciones.
El leopardo es un animal muy peligroso y los seres humanos no desean entrar en contacto con uno en la naturaleza, sin embargo, es posible que quieran apoderarse de la tierra donde viven estos animales, sin quererlos cerca de las zonas residenciales o que puedan matar el ganado.
Algunas personas desean verlos en su entorno natural y viajarán a la India por safaris guiados donde consiguen una mirada más real de estos animales en su hábitat natural. Antes de que te emociones demasiado, los leopardos pueden estar bien escondidos por lo que, incluso en zonas donde se sabe que son abundantes, no resulta posible tener mirada realmente cercana a ellos.
El leopardo puede matar y comer seres humanos de vez en cuando. Mayoría de las veces huirán ante la presencia humana, sin embargo, si sienten que están en peligro pueden ser fatal para los humanos. A veces simplemente los confunde con una presa.
Algunos estudios muestran que cuando sus fuentes regulares de alimentos son difíciles de conseguir el leopardo puede empezar a cazar a la gente en los pueblos o zonas cercanas a su entorno. Una vez que lo hacen inevitablemente repetirán pues lo prefieren a sus fuentes de alimentación normales, y esto puede resultar en un serio problema.
En el pasado un gran número de leopardos fueron asesinados por sus maravillosas pieles, hoy en día este no es un mercado tan lucrativo con en tiempos pasados, por lo que esto sucede con menos frecuencia. La caza furtiva se produce aun con el fin de capturar sus crías y venderlas en el mercado negro.